La economía de la tierra está constituida por los dos programas de EarthCorp: GESERP y el sistema de calificaciones de RSE. Estas son nuestras aplicaciones que se describirán más adelante.
Las teorías económicas pueden informarnos con cifras concretas los posibles resultados de los negocios, y la historia, posiblemente, respaldará a gran parte de ellos, pero no a todos. Esto conduce a cambios en teorías y enfoques. Un "equipo" puede estar valorado en $1,00 de acuerdo con una teoría económica, a la misma vez que una empresa lo vende por ese valor, pero otra lo vende por $2,50. Sobre lo anterior, una persona de negocios puede decir que esto se debe a que sus métodos de venta o su ubicación en el mercado son superiores u otras infinitas posibilidades, mientras un economista podría insistir que solo vale $1,00.
Ejemplo: tenemos un banano. Este banano cuesta $0.07 para producir, y al pequeño productor que la cultivó se le pagó $0.035 por ella. El propietario/empresa que compra al productor le agrega valor por algún medio, tal vez, por transporte y empaque. Un vendedor ambulante obtiene estos bananos por $0.25 cada uno. El economista puede decir que tiene un valor justo de mercado (FMV) de $0,50. Una persona de negocios puede ofrecerlo por $0.50, mientras que otro cree que puede venderlo por $ 3.00.
Un día de camino al trabajo, nuestro economista, estaba atrapado en medio de una congestión vehicular por un accidente de tránsito grave, sin posibilidad de bajarse o ir a ningún lado. Hacía mucho calor, habían pasado tres horas y nuestro economista no desayunó, la taza de café y la media botella de agua que llevaba se había agotado. Lo que decían es que iban a ser entre 1,5 y 2 horas más. Un vendedor ambulante llega con una botella de agua helada y.… sí, adivinaste, un banano. Precio de venta: $5,00. Nuestro economista estaba horrorizado. ¡Vamos! Ese valor ni siquiera está cerca de ser FMV. Sin embargo, las personas desembolsan más de $5,00 sin dudarlo. Costos de oportunidad. Decisión emocional. Quizás incluso una decisión de vida si fueran diabéticos.
Pues bien, mientras nuestro economista está tratando diligentemente de encontrar una manera de negociar el precio de otro banano y otra botella de agua a $1,50-2,00, nuestra persona de negocios está totalmente ocupada pensando en formas de encontrar o crear más de estas increíbles oportunidades.
Existe una teoría en química llamada principio de incertidumbre de Heisenberg, que dice que la posición y la velocidad de un objeto no pueden medirse exactamente, al mismo tiempo, ni siquiera en teoría. El físico alemán Werner Heisenberg dijo que nunca podremos saber realmente la ubicación de un electrón (esa pequeña partícula diminuta cargada eléctricamente que gira en la órbita de todos los átomos) porque se mueve demasiado rápido y es demasiado pequeño para verlo, y el solo acto de observarlo también altera su posición. A partir de esta teoría, la probabilidad de ubicar el objeto se da alrededor de un 90% de las veces. Es una suposición fundamentada. Es la nube de electrones. Un área de incertidumbre, donde sabemos que hay algo, pero no exactamente en qué lugar.
Si aplicamos esta teoría para ver cómo la emoción humana afecta la economía, y si consideramos que la emoción es un hecho que no tiene lógica, entonces nunca podremos decir con certeza cuál es el precio justo de mercado o para qué se venderá un artículo, o incluso para qué cualquiera pagaría por el en un momento dado.
El punto es que todas nuestras teorías e ideas sobre la economía, el valor y el dinero son solo teorías que están sujetas al control de las emociones humanas. Por tanto, la fuerza económica más poderosa que tenemos es la emoción: por qué hacemos lo que hacemos. Cómo podemos elegir gastar nuestro dinero.
Aquí no estamos abriendo un nuevo camino. Nos basamos en conceptos y procesos establecidos desde hace mucho tiempo que han sido utilizados con resultados variables a lo largo de la historia.
Ahora volvamos a nuestro banano. Al pequeño productor de alimentos (también llamado pequeño agricultor) se le pagó $0.035 por cultivar y cosechar el banano. Luego, la empresa compradora añadió valor agregado y finalmente se vendió por $1.00. Veamos lo que llamamos cadena de valor o valor agregado: Si nuestro banano se convertía en una Banana Split y se vendía por $7.00, el restaurante agregaba valor y el mayorista obtenía ganancias, junto con otras partes. Cuando tradicionalmente cultivamos un producto agrícola, al pequeño productor se le paga una tarifa fija por él, luego el "propietario" agrega valor y, por lo general, lo vende al por mayor a otro comprador que agrega algún otro valor, luego finalmente se vende al por menor a un consumidor final. Desde el lado mayorista/manufacturero y el lado minorista final, tenemos el costo de los bienes vendidos (COGS por sus siglas en inglés) que incluye materias primas (el banano) y mano de obra directa. También tenemos los gastos operativos de la empresa (OPEX), que son la mayoría de los demás costos comerciales, como el alquiler, el seguro, la comercialización y el envío.
Los típicos márgenes de venta son de un 25-50% menos que el precio minorista sugerido (SRP), como margen de beneficio para un vendedor minorista. Como vimos en nuestro banano, esto puede variar mucho. Aquí nos referimos a los principales canales minoristas. El mayorista/distribuidor que vende al minorista generalmente tiene un margen del 10-20% sobre el precio de la factura, que es el valor del SRP menos el margen minorista. El fabricante que le vendió al distribuidor generalmente busca ganar un 30-50% por encima de sus COGS. Así es más o menos cómo hacemos negocios minoristas todos los días.
El banano pudo haberle costado al productor/fabricante $0.07 (considere que le pagaron al agricultor $0.035), quien lo vendió por $ 0.25 a un distribuidor, quien luego lo vendió por $0.50 al minorista y quien finalmente lo vendió por $1.00 a un consumidor.
¿La gran pregunta? ¿Qué pasó con el pequeño agricultor en todo este escenario? Nada cambia para ellos. El fabricante, el mayorista o el minorista puede obtener un margen de beneficio menor o mayor, pero el pequeño productor está totalmente desconectado de todo esto. Recuerde: estas son las personas reales que trabajaron para cultivar los alimentos que a todos nos encanta comer. En muchos países tenemos alimentos que a menudo se desperdician, mientras que la mayoría de los pequeños productores luchan por sobrevivir.
GESERP significa Programa de Estimulación Económica Global y Regeneración Ambiental (por sus siglas en inglés). Esta es la primera etapa de cómo nos involucramos con la Economía de la Tierra. Cuando EarthCorp actúa como productor/fabricante y vende un producto, lo hace tanto al consumidor directamente como a través de los canales minoristas tradicionales. La diferencia es que EarthCorp regala el 25% del beneficio neto final al pequeño productor de alimentos. EarthCorp los apoya para cultivar alimentos puros, orgánicos y saludables y les paga un precio justo de mercado por ellos, luego agrega valor y los vende. Asimismo, EarthCorp reúne al pequeño productor, al minorista y al consumidor en una relación de trabajo en la que todos ganan y nadie necesita donar nada.
EarthCorp lleva los cultivos a lo largo de su cadena de valor hasta los bienes de consumo empaquetados que comercializamos y vendemos. Toda la ganancia neta se remonta al proyecto, no hay salarios para los miembros ejecutivos ni ganancias netas gastadas. El 50% se destina a EarthCorp para los costos operativos, el 25% se destina a un fondo fiduciario en cada país de origen para expandir el programa allí, y el 25% se entrega directamente al pequeño productor. En caso de que el 50% que se destinó para costos operativos no llegue a utilizarse, al final del año se remonta al programa.
Este es el modelo GESERP (Etapa I). Todos aún siguen haciendo dinero. Usamos nuestros sistemas existentes y reunimos todo el proceso desde el pequeño productor hasta el consumidor final. Este es el colectivismo positivo, una piedra angular de EarthCorp.
Aquí es donde el factor de la emoción humana que definimos anteriormente nos brinda la oportunidad de tomar una decisión consciente e informada que mejora el mundo y la vida de todos los que nos rodean. Podemos elegir cómo gastar nuestro dinero para asegurarnos de que tenga un impacto positivo. El principio de incertidumbre dice que nunca podremos conocer el verdadero valor de una mercancía; sin embargo, definitivamente podemos elegir cómo se usa el valor de nuestro dinero para mejor nuestra sociedad.
La Economía de la Tierra nos permite elegir a dónde va nuestro dinero y cómo afectará al mundo. No es necesario donar ni cambiar ningún aspecto de nuestras vidas o de los sistemas existentes. Solo se requiere una opción para ayudar. Un voto por un mundo mejor. Esto es lo que ofrecen los programas EarthCorp.
Usamos una escala de calificación para establecer la responsabilidad social empresarial del sector minorista, desde la más pequeña con un solo propietario hasta la más grande. La puntuación se basa en dos factores: responsabilidad medioambiental y responsabilidad social. Este no es un concepto nuevo, sino que hemos desarrollado una nueva forma de aplicarlo con algunas adiciones.
Son pocas las empresas del sector minorista que causan daños directos al medio ambiente. Suelen ser tiendas y almacenes, por lo que su responsabilidad medioambiental es bastante sencilla de establecer. El aspecto de responsabilidad social se basa en cómo las empresas manejan a los empleados y las relaciones con la comunidad.
En realidad, el 80% del puntaje se basa en las actividades Business to Business (B2B); con quién están haciendo los negocios para sus productos o servicios.
La intención es rastrear su cadena de suministro hasta el sector industrial. Sin duda, eres consciente de que pocas personas, conocen exactamente lo que sucede a ese nivel; por ejemplo, en la producción agrícola comercial, ganadería comercial, minería, fabricación de industria pesada, fracturación hidráulica, los plásticos y eliminación de desechos (dos que realmente esperamos ver resueltos) y muchos más. Estos son los espacios en donde estamos causando un verdadero daño al planeta. Quizás lo más importante es que creamos residuos no renovables a partir de lo que en realidad son recursos totalmente renovables.
Cuando EarthCorp crezca a proporciones globales y gane los corazones de cientos de millones de consumidores, tendremos la capacidad de influir de manera plena en el sector industrial. Cuando una PYME no le compra a un proveedor que tiene una puntuación baja porque esto impacta negativamente la suya, existen pérdidas para el sector industrial, lo que llevará a buscar soluciones. En EarthCorp les daremos soluciones equitativas que aumentarán sus ganancias.
Por el lado del consumidor, la membresía siempre es gratuita. Les pedimos que compren en las empresas que han sido calificadas y se han unido a nuestro programa, ya sea que tengan la puntuación más alta o el descuento más grande. Por esto son recompensados económica y socialmente.
Inicialmente, las empresas que reciben una puntuación del 70% o más son invitadas a la comunidad EarthCorp. Pedimos un 2% o más de descuento en sus ventas minoristas. Cuando los consumidores afiliados realizan una compra, pueden presentar su carné de socio para recibir un 50% del descuento en el punto de venta. El otro 50% se le da a EarthCorp.
Describimos esto como el uso de dólares publicitarios 100% efectivo en términos de pospago. La empresa puede determinar exactamente cuánto están dispuestos a pagar por una venta garantizada y hacerlo hasta que se completa la venta
Las compras al por mayor de tarjetas de regalo con descuento y programas de reembolso que suelen hacer los minoristas, son vendidas comúnmente con descuentos a los consumidores para generar nuevas ventas en las empresas. En ese contexto, el consumidor puede comprar la tarjeta como regalo o puede comprar el descuento (precio de compra). En cualquier caso, no hay retención ni fidelización de clientes. Con el modelo EarthCorp los consumidores están ganando económica y socialmente; satisfacen de manera eficaz ambas necesidades y por lo tanto se mantendrán leales a los minoristas que forman parte del programa EarthCorp. Siempre obtendrán el efecto "Me siento bien" sin donar un centavo.
Los objetivos a corto plazo de este programa incluyen la expansión en la participación de las empresas y el público, la generación de ingresos y completa prueba de concepto. Entre los objetivos extendidos están la competencia colaborativa entre empresas (conduciendo a un aumento en los descuentos que las mismas están dispuestas a ofrecer), grandes cantidades de ingresos y la unificación por el bien común donde todos los participantes se benefician social y económicamente.
Desde el lado del consumidor, lo llamamos Dar por Recibir. Nunca tienen que donar dinero, tiempo o esfuerzo. Ellos compran como siempre lo han hecho, y ayudan en el proceso. Ésta es la interacción de la economía social: Invitar a todos a ayudar a preservar y restaurar el medio ambiente, a la vez que se ayuda a los demás sin tener que sacar de su propio bolsillo. El efecto de sentirse bien sin costo alguno (Moneda social).
Desde el lado comercial, creamos una ganancia social similar junto con el lado financiero. Las empresas ahora pueden determinar cuánto gastarán en ventas y calcular gastos y ganancias con mayor precisión. Obtienen patrocinadores dedicados y una reputación más sólida. En mi opinión, lo más importante es que los dueños de negocios obtienen los ingresos de la Moneda Social al ser reconocidos y, por lo tanto, patrocinados por consumidores que se preocupan y desean ayudar. Desde nuestro punto de vista, a todos nos importa y queremos ayudar, y es posible que no haya un límite máximo para la cantidad de esta Moneda Social que se puede ganar, y no se podría devaluar. Todos podemos ser parte de la solución, si se nos brindan las herramientas y la orientación. Quizás en algún momento pueda tener una forma de valor de cambio que no sea directamente financiero.
Por el lado de EarthCorp, monitoreamos los puntajes, los ayudamos a mejorar. El puntaje es dinámico. Les mostramos cómo trabajar con empresas más responsables en el aspecto industrial les dará una puntuación más alta. Los consumidores verán los puntajes más altos y se les animará a patrocinar estos negocios.
Una empresa minorista que compra a través de una cadena de suministro respaldada por el sector industrial que daña el medio ambiente, recibe puntuaciones más bajas. Les mostraremos cómo evoluciona el puntaje y cómo pueden elegir mejores opciones. El objetivo a largo plazo es atraer una amplia atención hacia sector industrial sin la necesidad de que las empresas deban comprarles. Cuando esto comienza a suceder, EarthCorp se involucra para ayudarlos a mejorar sus acciones.
¿Cómo? Cuando EarthCorp captura entre el 2% y el 5% del ciclo de gasto minorista a nivel global, esto representaría una cantidad de dinero bastante grande, por lo cual se utilizará para ayudar a las empresas del sector industrial a mejorar. También a los negocios minoristas mediante el impacto colateral. Se pueden mencionar una cantidad infinita de opciones, pero la idea es crear un ciclo perpetuo en donde todos ganen y se deje de señalar con el dedo a los "malos" al hacer algo.
La lista de las famosas ‘‘malas empresas’’ es bastante larga, pero dudamos que alguna de ellas deseaba crear un negocio con la intención de destruir el planeta y nuestro futuro. Lastimosamente, muchas veces pensamos en formas de ganar dinero sin contemplar las consecuencias.
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